Las personas con transtorno mental grave pueden ver dificultada su capacidad para la convivencia debido a la pérdida de habilidades sociales y cognitivas. El trabajo de rehabilitación llevado a cabo por Alume trata de favorecer la autonomía de los pacientes, interviniendo también con sus familias para hacer posible la convivencia. En situaciones en las que no existe esa posibilidad, ya sea por desarraigo, por su situación clínica, por motivos económicos o por cualquier otra causa, Alume dispone de pisos protegidos, en los que se ofrece a sus habitantes, además de una vivienda compartida, la supervisión y apoyo necesarios para una vida en plena integración social.

En marzo de 2022 Alume tiene en funcionamiento 5 pisos con un total de 21 plazas, de las cuales, 17 están concertadas con el Servicio Galego de Saúde de la Xunta de Galicia, y las otras cuatro corresponden a un programa específico de atención a mujeres víctimas de violencia de género que padecen enfermedad mental, que está subvencionado por la Secretaría Xeral de Igualdade de la Xunta de Galicia.

Para el sostenimiento de los pisos la asociación cuenta además con una ayuda del Concello de Lugo para el alquiler de una de las viviendas.

La incorporación a un piso de Alume está sujeta a una serie de condiciones.

• La derivación debe proceder de los servicios de Salud Mental de la Xunta de Galicia o, en todo caso, autorizada por dichos servicios.
• Es obligación del paciente participar en el programa de Rehabilitación Psico-Social de Alume, con objeto de garantizar un desempeño correcto en la vivienda.
• Existen además una serie de normas de orden interno destinadas a regular la convivencia de todos los habitantes de cada piso.