Debido a la situación actual por el COVID-19, en nuestra asociación nos vimos obligados a pausar la atención presencial. Durante estos meses hemos estado haciendo un seguimiento telefónico diario y, cuando la situación lo requirió, atención domiciliaria de los usuarios para intentar prevenir situaciones de riesgo que pudieran empeorar su salud mental, sobre todo en aquellos casos en los que viven solos. Nos ha alegrado comprobar que nuestros usuarios han conseguido llevar la situación con una relativa normalidad y agradecemos la valoración tan positiva que han hecho de este seguimiento. Celebramos especialmente que no se produjese ningún ingreso hospitalario en la Unidad de Agudos de Psiquiatría durante este período.
Desde el día 3 de junio hemos comenzado a retomar de forma escalonada la actividad presencial de la entidad. En un principio las personas que empiecen se entrevistarán con la psicóloga y la terapeuta que evaluarán su situación y además les informarán de la nueva forma en la que va a funcionar el centro.
Lo más importante es la seguridad y la prevención, así que tendrán que venir por turnos, ponerse mascarilla y seguir las normas del centro para evitar contagios. No podrán acudir las personas que noten algún posible síntoma del COVID-19.
Los grupos de los diferentes talleres serán reducidos para poder mantener la distancia de seguridad, y se mantendrá el seguimiento telefónico en los días que no acudan al centro para atender sus necesidades.
A partir de ahora la actividad se irá regularizando, dentro de esta “nueva normalidad”, con todas las medidas de prevención, recursos y protocolos, para que la atención sea lo más segura posible.